El uso de equipos y técnicas adecuadas para reposicionar al cliente en la cama pueden mejorar los entornos de trabajo de los cuidadores y ayudar a la independencia de quienes están a su cargo.
Al mejorar las condiciones de trabajo de los cuidadores, se reducirá el riesgo de lesiones y, por lo tanto, se reducirá el absentismo. Una baja por enfermedad no solo tiene un impacto financiero en las instituciones, sino que también puede afectar negativamente el nivel de atención que se recibe debido a la reducción de personal. Los problemas de espalda pueden ser un importante riesgo laboral para los cuidadores. Reposicionar al paciente en la cama puede ser un trabajo duro, especialmente en los regímenes de turnos nocturnos. Afortunadamente, hoy en día hay una serie de productos disponibles para ayudar a los cuidadores con estas duras tareas.